La tortuga milenaria solía decir: "No sé a qué vienen tantas prisas. En el lapso de tiempo de esta breve vida no podríamos llegar a donde queremos ni aunque pudiéramos viajar a la velocidad de la luz, así que es preferible no apresurarse."
Señoras y señores, diversos problemas técnicos impiden que por el momento mantenga este humilde blog actualizado.
Espero haberlos solucionado en breve. ¡A ver si podemos seguir con esto!
Saludos y gracias por vuestra paciencia.